La Pequeña Travesía
según Dr Jekyll and Mr Hyde
Dr Jekyll
Latitud Sur lleva haciendo eventos de Trail Running por todo Chile hace bastante tiempo en locaciones poco convencionales, otras no tanto, con un formato austero y con un nivel de dificultad para el corredor superior al promedio. Creo que en eso hay bastante unanimidad.
Esta versión de La Gran Travesía tiene a mi juicio tiene 3 elementos que destacan:
Para el que no sabe, esta carrera nació en la cordillera de la costa y se ha trasladado a un nuevo lugar. Ha quedado meridianamente establecido que hacer una carrera en la cordillera de Los Andes, tanto a nivel organizativo como de dificultad para el corredor es por lejos mucho más difícil que enfrentar el mismo kilometraje en otra ubicación. Cosa que ya había planteado latamente en posts anteriores, pero como siempre mi voz es acallada por la épica cebollera de los que buscan destacar a cualquier precio. Consideren además que tuvieron un fin de semana impecable en términos de tiempo, tres días completamente despejados, vientos de 15 kms por hora y ráfagas de 35 km/h. En los portezuelos de seguro los golpeó un poquito más, pero en términos generales fue una taza de leche. De lo contrario la historia habría sido completamente distinta.
Pero claramente el evento se logró y no hubo accidentes que lamentar.
La gestión de permisos de los predios fue a mi juicio muy buena. Quizás tuvo un golpe de suerte de que se haya creado recientemente el Parque el Yeso, administrado por Parques Cordillera. Consiguió además la autorización de Aguas Andinas (según cercanos a la productora no hubo auspicio monetario, sólo el permiso de paso) Excelente negocio para Aguas Andinas que la tiene difícil para destacar por cosas positivas. Uno de sus gerentes obtuvo varios minutos en TV abierta, lo más probable es que haya sido la agencia de comunicaciones que trabaja para ellos, pero raya para la suma, igual fue un excelente negocio a precio de ganga.
Y lo más difícil, conseguir la autorización de Bienes Nacionales, aunque Pablo ya sabe navegar en esas aguas. Si revisan el Portal de Transparencia, verán que solicita muchas reuniones a municipalidades y otras organizaciones gubernamentales regularmente.
La llegada al pueblito mismo de La Parva, le suma y le agrega seguridad en comparación con Bike Park donde los corredores siempre deben estar atentos para esquivar las bicicletas y facilita la llegada de público que no tienen que lidiar con el camino que está en mal estado.
Y lo tercero y más importante, puso en valor nuestra cordillera, pocas productoras se atreven a hacerlo por los costos involucrados y el gran riesgo inherente de desarrollar eventos ahí. A su vez quienes participaron pudieron acceder a lugares que están prohibidos o que pueden visitar sólo después de hacer una larga gestión administrativa, sin considerar que cuando lo consiguen deben hacerlo en total autonomía y que por la locación difícilmente pueden encadenar en un solo acto estos predios ya que tienen distintos administradores. La mayoría de los corredores, coincidieron que las vistas, los pasos de montaña y el trazado fue espectacular. Yo que conozco muy bien esa zona, coincido. En toda nuestra cordillera hay parajes fantásticos. Quienes corrieron tuvieron el privilegio de recorrer lugares increíbles, que las personas comunes y corrientes no podrán visitar en sus vidas. A menos que paguen un viaje en helicóptero de un millón de pesos por hora de vuelo.
Ahora veamos que dice Mr Hyde porque no todo fue perfecto.
Mr Hyde
Descargo de responsabilidad
Consideren que yo no corrí la carrera pero recibí numerosos comentarios y reclamos de corredores con temas que se repitieron. También revisé las redes sociales de la carrera y el sistema de control de tiempos. Desde que destapé la mentira de Ojos del Salado, Pablo Garrido me bloqueó de todas las redes sociales de sus carreras para que no vea sus fechorías. Pero mala noticia para él porque las sigo viendo sin ningún problema cuando necesito chequear algo, tengo mis recursos. Por tanto, toda la información recibida ha sido contrastada y confirmada. Así que vamos por ello.
Los tiempos de corte
La venta inicial fue una carrera sin tiempos de corte. Algunos corredores refieren que durante la charla técnica apareció un corte de 15 hrs en el Drop Bag del km 45 y en redes sociales de la carrera se indicó un máximo de 36 hrs para terminar, que finalmente terminaron siendo más de 40 horas según las últimas llegadas. Elasticidad para dejar como campeones a la mayor cantidad de clientes posible, buena onda dirán otros. Juzgue usted.
Mientras seguía la carrera apareció Pablo Garrido en un video con su voz en off, estaba posicionado en el km 23 diciendo que estaban próximos a cortar a los últimos 9 corredores y que les permitirían avanzar fuera de carrera desde el AB Km 45. Aduciendo cuestiones de seguridad porque arriba estaba muy ventoso. Ahí concluí que algo no andaba bien con la carrera porque no puedes ponerte a improvisar cortes tan temprano, ya que mirando las imágenes del cielo, la ropa de las personas y Windy, era un día ideal. Suele pasar que si no has hecho un buen filtro en la inscripción te va a llegar gente entusiasta pero poco preparada. Porque no se podía culpar a la altura ya que la carrera había comenzado apenas a 2.300 msnm y en el km 23 apenas habían ascendido un poco más de 400 metros de desnivel. El problemita es que los corredores de cola ya llevaban cerca de 4 horas de carrera y algunos más.
Esto es especulación mía, pero viendo el reloj, seguramente a Pablo le bajó el pánico y empezó a tratar de deshacerse del lastre y hacer control de daños. Pues obviamente no tenía contemplado evacuar a nadie desde el embalse y tener que llevarlos a Santiago. Contaba con que todos o la mayoría de los corredores iban a ser capaces de sortear el primer portezuelo sin problemas. Así que quienes ya no podían volver a sus casas por sus propios medios, la organización iba a tener que trasladarlos hacia Santiago. De ahí el tan particular beneficio de tomarlos y llevarlos al Drop Bag. Eso yo no lo he visto nunca en otra carrera donde a un DNF le permitan seguir corriendo a partir de otro tramo. Es de esperar que ninguno de los “beneficiados” hoy aparezca como finalista con medalla y todo. Aunque ya hemos visto de todo con LSE.
Ese es el gran problema del formato de travesía, le complicas la vida al corredor y se la auto complica el productor. Pero bueno, cada maestrito con sus ideas.
Ustedes pensarán que ya se habían acabado los problemas. Pues no, pese al control de daños, el ascenso hasta el portezuelo resultó ser una larga procesión para la mayoría de los corredores. Unos pocos lograron sortear el primer portezuelo antes de las 9 horas de carrera con apenas 35 km de avance. Este punto sería el mayor colador, pues aquí si coquetearon con algo de puna, al pasar por 4.000 msnm por unos pocos minutos. Para ponerlo en perspectiva es como hacer un cerro Pintor. No estamos hablando del Plomo, ni el Ojos, pero suficiente castigo para muchos, que refirieron no tener experiencia alguna con la altura. Muchos de ellos viven a nivel del mar. Un corredor me contó que vive a -20 metros de hecho.
Cuando se empezaron a agrupar en el AB45 las cosas se empezaron a desarticular. Un corredor me narró que cuando iba llegando al Drop Bag ya estaban retirando las cintas, llevaba 12 horas y media de carrera más o menos y más encima le informan que su bolso y el de otro corredor estaban en La Parva.Y la situación se pone más bizarra aún, Pablo le ofrece ir a buscar su bolso a La Parva y que mientras se embarque en el vehículo que llevará a Santiago a la gente que está fuera de carrera. Lo dejarán en la Copec de La Florida y ahí le entregarán su bolso . El ruega que lo lleven a la Parva porque ahí tiene sus documentos y dinero, pero le dicen que es imposible (raro porque tendrán que desplazarse para allá si o si) La impresión del corredor es que simplemente querían deshacerse de él porque no había forma de que Pablo u otra persona fuera y volviera a la Parva, ya que es un trayecto redondo de unas 6 horas. Piensen en la situación, un corredor de provincia que no conoce la ciudad, con poca ropa, sin dinero y esperando largo tiempo en una estación de servicio de noche. Otro corredor le prestó dinero para comer y después de varias horas como no aparece quien le entregaría su bolso, contacta a la organización y tiene la suerte de que por ahí pasaba un vehículo que regresaba al AB45. Otra vez de vuelta en el cajón del Colorado, pasó lo que quedaba de noche con una manta térmica, para finalmente al día siguiente bajar a Santiago hasta el sector de los Domínicos donde la organización les dejó tirados los bolsos cerca de la basura, en las afueras de la casa de un tercero.Plop.
Lo lógico es que lo hubieran llevado a la Parva o hubiera permanecido en el AB45 y evitar ese absurdo paseo. Aunque este corredor haya adornado la situación o haya omitido algo importante, a mi me suena bastante desconsiderado y es reflejo del problema que se les produjo. De 108 corredores tempranamente se deshicieron de 9 pero algunos fueron llevados al AB45. Así que aún tenían que lidiar con más de 40 personas y llevarlos a Santiago en una van bastante pequeña repleta, esto es literal: “tuvimos que parar varias veces para tomar aire”. La impresión que me queda es que los DNF igual se pegaron un ultra, pero de transporte.
¿La carrera más dura de Chile?
En estos días he leído esta frase varias veces. Los épicos siempre establecen una relación de complicidad con el organizador, él necesita resaltar su evento y los participantes necesitan creer y demostrar que son lo máximo. Que han llegado a la cúspide de la pirámide, que sobre ellos sólo está Kilian. Tratarán de vender la idea a los más neófitos, que han participado con éxito rotundo en la carrera más extrema del mundo mundial. Incluso si fracasaron no perderán la oportunidad de postear alguna foto, con excusas baratas. Preferí no castigar mi cuerpo. Este guerrero se guardará para otra batalla. La puna es terrible, bla, bla. Toda esta épica se cae cuando ves llegar a la meta a un sesentón en modo diesel quemando aceite con cara de nunca más, pero que lo logra. Podremos discutir que la velocidad importa, sin duda, pero eso da para otro post.
Son pocos los corredores que aquilatan sobriamente las cosas, con un mínimo de objetividad, o quizás uno sólo ve a los sobregirados y vende humo.
En términos de altitud LGT no fue muy alta. Aquí hay que compararla necesariamente y yo tengo que compararla con lo que conozco. Andes Infernal es pionera en la zona y tiene varias carreras ahí. La más conocida es El Plomo 5.434 msnm, un KV que llega a 5.200 msnm, Plaza - Plomo 90K con 6 mil mts de desnivel positivo, 300K y los 100K del Río Olivares. Pablo usó el paso del Cepo, ruta que te permite pasar desde Valle Nevado al Cajón del Río Olivares en apenas 20K. Yo mapeé y abrí esa ruta en modo carrera hace varios años. Muy poca gente conoce y recorre ese paso, de hecho muchos andinistas me preguntan por el GPX a menudo. Costó bastante encontrar el sendero óptimo pues como ya no lo usan los arrieros, está borrado en varios puntos por los derrumbes y la cordillera se mueve año a año, aunque se vea inmutable. Hice como 5 viajes hasta encontrar la ruta óptima. Nadie sabe para quien trabaja.
A diferencia de la LGT nosotros nos internamos mucho más en la cordillera hasta una espectacular cascada de 200 mts de altura al final del río Olivares y tienes que pasar dos veces por el portezuelo del Cepo, en la ida y luego al regreso. Imaginen correr por ahí en completa autosuficiencia de día y de noche sin marca alguna, reabasteciéndote de los cursos de agua y portando toda tu comida. O correr desde la Plaza de Armas en modo running, pasar a modo trail running hasta la Parva y de ahí juntar lo que queda de tu humanidad y emprender el rumbo al Plomo en modo skyrunning, para en menos de 30 horas estar de vuelta en La Parva. Muy pocos corredores corren estas carreras, pero ahí están y seguirán estando sólo para machos lomo plateado como Egloff, Lasen, Cartes, mujeres potentes como Rosalía Zegarra, Constanza Leal o Jacqueline Cárdenas, por nombrar algunas, que si te pillan débil te pasan por encima en un pestañeo. De hecho una posta mixta tiene el record actual en apenas 15 horas de carrera desde la Plaza de Armas al Plomo.
Las fallas de logística
Varios corredores refieren problemas con el agua y comida comprometidos después del AB 45. Uno de ellos, prevencionista de riesgos, comentó que había una falta evidente de seguridad, falta de personal a partir del AB63, falla de las comunicaciones y falta de servicios prometidos en la medida que avanzaban hacia la meta. Recuerden niños, no basta con que el organizador les diga que tiene equipo de rescate con WAFA, WFR, etc. Importa el número, mínimo 5, ideal 6 personas por equipo y en un trazado largo, se requieren varios equipos. Les aseguro que en caso de accidente grave, no tenían cómo sacarlos de la montaña. Uno o dos pelagatos en un punto no cuentan como equipo de rescate y si ese pequeño equipo tiene que actuar ¿quién queda a cargo del punto? Ahí se las dejo.
Mal diseño de la ruta y marcaje
Al revisar el GPX y contrastándolo con la ruta óptima se observan muchos errores. En varios puntos en vez de enviar a los corredores por senderos existentes más amables, los lanzaron a lo derecho a trepar literalmente, apaleándolos innecesariamente. Hubo un par de puntos con poca preocupación ecológica, porque los lanzaron sobre la yareta, una planta protegida que sólo crece en la cordillera y que puede tener más de 1.000 años de vida, en vez de usar el sendero que ya está sacrificado y que se encuentra sólo a unos decenas de metros. Revisando los Strava de varios corredores se observan diferencias entre el el GPX entregado por la organización y el marcaje final. Esto ya es una constante, pareciera que las rutas las dibujan en un escritorio o que el marcador improvisa, porque nunca coinciden. En la última carrera que corrí con LSE, las marcas iban por un lado y la ruta del GPX iba como a 50 mts por otro. Otro problema es que esto permitía que alguien que hubiera estudiado bien la ruta, podía acortar varios kilómetros en total, sobretodo en parte final cercana a La Parva, los mandaron por un camino serpenteante, mientras que el óptimo te permitía acortar casi 30 minutos. Alguien perfectamente se podía dar un festín de cortes, porque en ese punto no había control y así lo declaró la organización cuando se le consultó en la charla técnica. Así que todo dependía de la honestidad de los corredores, que ya sabemos es escasa.
El control de tiempos
Esto merece comentario aparte. El ofrecimiento de tiempos “en línea” resultó ser bastante pobre. Era frustrante ver tiempos raros en algunos corredores que duplicaban o triplicaban los tiempos de carrera del resto, en estadios tempranos de la carrera. Daba la impresión de que era un error de ingreso de datos o vaya a saber uno que. Hubo también falta de actualización de los tiempos por largas horas.
No hubo tiempo de meta, los tiempos del AB83 (paso del Cepo) terminaron siendo los tiempos de meta. Un total caos. Los pobres familiares que siguieron la carrera o compañeros de equipo deben haber pasado varios momentos de incertidumbre y preocupación por los suyos. La causa habría sido problemas de comunicación y que el encargado de los tiempos habría tenido que realizar tareas de transporte no contempladas originalmente.
Según cercanos a Pablo, perdió dinero y ya no volverá a hacerla. Yo no le creo, siempre se hace el pato cojo. De hecho ayer ya publicó. ¡Nos vemos el 2025!.
Y barata no fue, pagaron hasta 160 mil por una carrera deficiente en muchos aspectos, valor bastante cercano a una carrera tipo UTMB.
Por todas estas razones titulé esta columna de opinión como La Pequeña Travesía.